Una hora libre al fin.

Bueno más que una hora libre, es que no me apetecía ir a clase de alemán. Me aburro mucho y para dar cosas que ya sé... pues bueno aquí comento la pasada semana que ha dado para mucho la verdad, aunque ha sido demasiado estresante.
Yo como buen estudiante, y últimamente algo pelota, me apunté a un seminario sobre la formación de traductores, un tema nada apasionante la verdad pero hay que hacer créditos de libre configuración y con esto me daban 3. Qué sufridos son estos créditos!! Tras acudir a conferencias la mar de aburridas, en las que el calor, la desgana y un mal cuerpo tremendo acabé destrozado. El último día, viernes, se pasaron Rous y Sergio por nuestra casa a hacernos una visita a Patri y a mí. Y claro entre risas, anecdotas y muchos cotilleos, hay que ponerse al día claro, decidí hacerme un porro. Aún por la tarde me quedaban dos conferencias, una sobre un programa informático y otra sobre el uso de herramientas informáticas para la traducción, pero la gracia era que era en inglés. Ya me veis a mí, allí con el calor que hacía y con un fumadón que ni me tenía, por dios, no me enteraba de nada. En el fondo me enteraba de más y cuando hacía una gracia el ponente yo me partía el culo. Si es que soy lo peor...
Después me fui a ver a Jabalicia para ir a hacerle una visitilla a su Haus, muy mona por cierto. Y a las 10 de la noche me fui para casa porque tenía que venir a casa una amiga que el año pasado estudiaba con nosotros pero que se pasó a Salamanca este año. Vino con su noviete, y nos montamos una minijuerga, hablando y recordando tiempos pasados, que según la canción eran mejores, yo lo pongo en duda, volvimos a hablar de cotilleos, y es que yo debo de vivir en el país de la gominola o de la happiness porque no me entero de nada!! y uno claro le cuentan según que cosas y se escandaliza. Estuvimos hasta las 5 de la mañana, muy mal hecho porque me tenía que levantar a las 9 para ir a una excursión por la provincia de Soria, uno que que quiere abarcar mucho pero al final no hace nada..., pues en susodicha excursión visitamos un yacimiento paleontológico de mamuts, bueno eran elephantis anticus que se parecen pero no tienen pelo. Y a mí desde antes de ver Parque Jurásico, no me refiero a ese presidente de la comunidad gallega, sino a la peli del Spielberg, que me acabo de dar cuenta de que significa montaña de juegos en alemán, me encantan todos los huesos. Más tarde fuimos a Medinaceli, y por dios que ciudad, porque tiene el calificativo de ciudad, más bonita!!. Mi compañera de piso del año pasado de quién he hablado en algun post, Olga, vive allí y ahora me imagino porque es tan artística ella. No me extraña viviendo en un pueblo así a uno le llega la inspiración por todos los lados. La pena es que el arco estaba tapado, tengo la suerte de ver todos los monumentos con andamios, cuando fui a París vi el Sagrado Corazón con andamios, en Roma la iglesia que hay arriba de la Pza de España... y si sigo así... podría decir cientos de ejemplos más. Me fui al bar de Olga para verla en su salsa, bueno su salsa... su casa mejor dicho y me invitó a comer. Muchas gracias majetona, te aprecio un montonazo fuiste, eres y serás una gran inspiración para mí.
Por la tarde fuimos a ver un monasterio cisterciense la mar de bonito, con dos claustros, un refertorio precioso, etc etc... pero demasiado moderno. Nos metieron en una sala toda oscura, que miedo, donde nos pusieron una explicación audiovisual sobre el císter, esot me suena a cistitis. No veais, había un muñeco vestido de monje con su capucha y la cara negra, que hablaba!!! por poco me hago cositas encima!! Ni comparación con la casa del terror, tienen que patentarlo porque te acojonas vivo.
Cuando llegamos a Soria de nuevo me estaban esperando todos para ir a comprar provisiones. Nos reímos un montón con Sergio que se ponía bolas de navidad, enormes, como si fueran su partes pudendas.
Por la noche volvimos a hacer botellón en nuestra casa, los vecinos tienen que estar hasta los huevos. Salimos borrachisimos de allí, y bueno de fiesta por los bares no os quiero ni contar, me bebía el agua, llamese tequila, ron, heineken, de todos los sitios donde pisabamos. Al final, sobre las 6 de la mañana perdí a la gente, soy lo peor me quedo hablando hasta con las paredes, y me fui para casa. En el camino vi a Laura, una amiguisima aborigen soriana, y estuve hablando con ella y llamando por teléfono a otra amiga que vivia en frente para decirle que se asomase por la ventana.
De vuelta a casa, la otra Laura, Patri y yo estuvimos llorando un poquitín, bebiendo hasta que me fui a comprar a las 10 de la mañana el periódico y el pan.
Para comer, con todo el resacón, hice una paella buenísima acompañanda de unos cuantos ibéricos, esto es mentira era embutido normal, y comimos genial.
Ahora estoy liadísimo con todo lo que ya he escrito abajo.