De como Miguel no se acuerda de nada.... after birthday

Por fin estoy libre de toda carga académica y estudiantil, por ahora claro... ya que alguna caerá para septiembre seguro.
Aunque estemos a jueves, y ya haya pasado casi una semana desde mi viaje a Madrid, voy a contaros como fue todo desde mi punto de vista. Tengo que empezar avisando que no me acuerdo de mucho de lo que pasó, bueno tengo que matizar, tengo la memoria borrada desde que salió el sol.
Fuimos de los primeritos en llegar a casa de nuestra adorada Gilda, y pronto nos autoservimos de una sangría que estaba buenérrima y bien fresquita que era lo más importante. No sé como soportáis los madrileños esos calores, parece que estes en una sauna... jejeje, pero de esas sin tios en pelotas y con una minitoallita pero que conste que yo NUNCA las he visitado... ¿o sí? Ay es que cuando bebo tengo muy mala memoria. Y de eso fue el cumpleaños. De memoria o más bien falta de ella. Debió ser por los humos inhalados de la barbacoa, y es que oye cuando uno esta haciendo unos pinchos morunos, morcillas y costillas la grasilla que sueltan es tóxica y produce perdidas de conciencia e incluso ebriedad. Tengo que decir que la fiesta fue genial eso sí, yo me lo pasé como un niño entre mayores... y es que era el más pequeñín bajo el cenador.
Ahora ya cuando más o menos desperté de el estado causado por los humos barbacueriles, me di cuenta de que tenía las piernas depiladas, bueno sólo medias piernas, pero rebobinando no recordaba ningún momento de dolor, ni cera ni nada que se le pareciera. Lo mejor es que queda muy hortera, no puedo llevar pantalones cortos porque como entenderéis la parte de arriba es bien peludilla, sino uno no puede ser osa. Según he leído en algún blog de los allá presentes, estuve media noche con los zapatos de Gilda, taconazo; he visto hasta una foto, pero yo no me acuerdo de nada de eso tampoco.
Y más tarde sé que un Guardia civil, vestido de civil eso sí, que morbo si no... y su amigo nos llevaron hasta Gran Vía a Soliloco y a la YA-MEDIO-OSA Jurado, o sea moi. Fuimos al XXY pero lo habían cambiado de sitio y nos dirigimos para allá. Pero esto me lo ha recordado Soli, porque yo... no me acuerdo. Luego del sitio este, yo me fui a hacer cochinadas por ahí y más tarde a la Fnac a comprar. Me moría de vergüenza porque iba todavía con un pedo increíble y toda la mierda de MadriZ había decidido ir a parar a mis pantalones... blancos para más inri; soy un puto cerdo. Me compré 10 comics de Ralf König, es que no controlaba mis actos, así que la cuenta del banco ha bajado un poquito...
Me monté en el metro y con el sueño que tenía me quedé dormido, creo que me pasé cuatro paradas. Conseguí llegar a Av. América y me monté en el bus. Pero en cuál... me monté en uno que iba por los pueblos de toda Guadalajara y resto de Soria. Sólo tardé 4 horas y 15 min en hacer un trayecto que normalmente hago en 2 horas y poco más.

Desde luego... yo y los autobuses... un mundo aparte